Ola de calor y embarazo. Cosas que debes saber

Nos encontramos en plena ola de calor y si estás embarazada debes tener en cuenta una serie de precauciones que hoy trataremos en este artículo. Las consecuencias de una insolación o de un golpe de calor son de elevado riesgo y pueden afectarte de forma seria pudiendo padecer enfermedades graves relacionadas con el calor. Con las altas temperaturas el cuerpo debe trabajar más para mantener fresco el feto y por eso, la primera premisa que debemos tener clara es que hay que evitar las exposiciones al calor durante las horas centrales del día.

¿Cómo afecta la ola de calor a las embarazadas?

La primera consecuencia de un golpe de calor es la deshidratación. Al sufrirla, el cuerpo tiene dificultades para producir el sudor, responsable de enfriar el cuerpo y, por tanto, de mantener al bebé a la temperatura adecuada. Las personas expuestas al calor tienen un mayor riesgo de tener la presión arterial alta y, por tanto, de sufrir preeclampsia durante el parto. Esta enfermedad puede desencadenar el riesgo de sufrir un parto prematuro o de tener un bebé con bajo peso.

¿Qué podemos hacer para combatir el calor?

Como ya hemos dicho antes, hay que evitar al máximo salir a la calle en las horas centrales del día (de 11 ha 18 h), que es cuando hace más calor. Si estamos en casa, durante estas horas hay que cerrar persianas y cortinas durante el día, para que cuando vayamos a dormir tengamos las habitaciones y estancias lo más frescas posibles. Por la noche, podemos abrir ventanas totalmente para que entre el aire fresco.

También se recomienda optar por una dieta ligera, evitar bebidas azucaradas o con cafeína. Tienes que beber mucha agua, aunque no tengas sed. Las frutas de temporada como el melón, la sandía y los melocotones están altamente recomendadas porque tienen mucha agua y nos refrescarán. También puedes comer gazpachos, salmorejos o cremas frías.

Viste con ropa muy ligera y transpirable, ponte un sombrero o una gorra y un calzado fresco y cómodo. Si tienes mucho calor, puedes darte una ducha que te refrescará.

¿Cómo actuar si no me encuentro bien?

Si no te encuentras bien, sufres de mareos o te duele mucho la cabeza, comunícale a la persona que tengas más cerca para que te supervise en todo momento. Si comienzas a notar mareos más potentes y vómitos, te recomendamos ir a urgencias para que un médico verifique que todo va bien.

Si haces caso de las recomendaciones para evitar el calor, todo irá bien. ¡Disfruta del verano de forma segura y descansa!

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